Red escolar

Culturas lacustres

 Universidad Pedagógica Nacional
 Cuaderno de Trabajo

Cuicuilco

En la cuenca del valle de México empezaron a construirse grandes estructuras y espacios ceremoniales a partir del año 500 a.C., pues la población comenzó a concentrarse en villas de mayor tamaño. Cuicuilco, construido a orillas de uno de los lagos que había, fue sin duda el centro de población más importante durante el periodo "Preclásico tardío".

Junto con Cuicuilco, las villas de Tlatilco, Tlapacoya y Teotihuacán se encontraban en puntos idóneos para aprovechar los recursos del valle. Las primeras se alojaban en las cercanías de los lagos de Texcoco, Chalco y Xochimilco, cuyas riberas y chinampas tuvieron una rica producción agrícola. La última, se ubicó junto a dos yacimientos de obsidiana, una piedra importantísima para los pueblos mesoamericanos.

Tenemos pocos datos acerca de su organización social; sin embargo, algunas de las figuras encontradas nos indican la aparición de un grupo privilegiado pues en algunos casos aparecen con adornos que seguramente portaban aquellos que ejercían el poder. Por otra parte, las tumbas encontradas bajo las casas o en los campos, parecen indicar un culto a la muerte y su integración al ciclo vital. Los enterramientos permiten detectar las diferencias sociales que existían, pues los cadáveres se acompañaban con ofrendas, determinadas por el status social.

En Tlatilco se han encontrado figuras de cerámica que representan acróbatas, danzantes, músicos, jugadores de pelota, verduras y animales, pero prevalecen las figuras de mujer, lo que nos hace suponer que rendían culto a la tierra como diosa femenina procuradora del sustento. Las figurillas que representan mujeres desnudas indican un ritual agrícola de fertilidad.

También existía la creencia en un dios viejo que custodiaba el fuego. Asimismo, como se han encontrando objetos y figuras hechas con material procedente de regiones lejanas, se deduce la existencia de intercambio entre los diversos grupos mesoamericanos.

Hacia el año 100 a.C. Cuicuilco fue víctima de la erupción de un pequeño volcán a las faldas del Ajusco. Muchos campos de cultivo quedaron inútiles y la ciudad sepultada. Este fenómeno obligó a los sobrevivientes a trasladarse a la orilla oriental del Lago de Texcoco, donde más tarde colaborarían en la construcción de Teotihuacán que se convirtió en el centro indiscutible del valle de México. De Cuicuilco sólo se conserva una pirámide de base circular, rodeada por el pedregal que formó la lava del Xitle.

Periodo preclásico