De un tiempo a la fecha los años parecen más cortos que nunca. Y no es para menos con la precocidad de las promociones y campañas publicitarias. Roscas de reyes y árboles navideños parecen no necesitar ya de épocas especiales para venderse, con el afán de ganarle a la competencia productos de temporada se adelantan con descaro al tiempo.


Desde finales de septiembre comienzan los adornos navideños en centros comerciales. Estamos, pues, en el fuego cruzado de una guerra campal de publicidad en la que todos somos el objetivo.


Es casi imposible encontrar un niño que no sepa desde hace varios meses qué es lo que pedirá como regalo en esta temporada; y tampoco falta uno que otro obsesionado en comprar los regalos más caros, aunque éstos no sean precisamente los mejores o más útiles.


Aunque tal vez no pueda escapar por completo al consumismo de la temporada, puede al menos hacer otro tipo de regalos a sus hijos. He aquí algunas recomendaciones:


 

* Regale un diario y motive a sus niños a escribir. Existen de todo tipo y precio, aunque también los puede hacer usted mismo con ayuda de su hijo. Son especialmente recomendables los que tienen algún tipo de candado, ya que la sensación de secreto es un incentivo extra.
 
* Un cuaderno grande de papel reciclado puede servir también como un coleccionador para hojas.
 
* Un álbum puede ser un excelente coleccionador de los recuerdos del año por venir, en él tienen cabida insectos, flores, piedras, fotos y testimonios escritos de experiencias de viaje.
 
* Durante el baño, con una crema de afeitar barata se puede dibujar y escribir en espejos y tinas. Existen también libros especialmente diseñados para sumergirse en agua.
 
* Una cámara no muy costosa o una cámara desechable es otra buena opción, lo importante de este regalo es que su hijo se sienta en libertad total para fotografiar y ordenar las fotos en su propio álbum.
 
* Una libreta común se puede convertir en un atractivo recetario. Compartir las recetas preferidas y su elaboración puede ser muy divertido. Se sugiere también que los niños escriban un apartado de su reacción y la de los demás al comer los productos de las recetas.
 
* Una bolsa con muchos compartimentos puede convertirse en una bolsa de viaje llena de marcadores, papel, lápices y, como elemento especial, algún sencillo manual de papiroflexia.
 
* Construir un libro de poemas basado en los poemas favoritos pero cambiando algunas palabras, logrando así rimas graciosas inventadas por los niños.
 
* La sección de literatura de las librerías, es otra opción que no debe omitirse: en ella encontrará libros adecuados a la edad de cada niño.
 
* En las papelerías también se pueden encontrar juegos completos de pintura para niños. En fin: las opciones son muchas, y usted tiene la última palabra para regalar algo divertido que estimule la inteligencia de los niños.
En fin: las opciones son muchas, y usted tiene la última palabra para regalar algo divertido que estimule la inteligencia de los niños.